MINISTROS ANGELICALES
Por
Víctor Pérez D.
Primera
parte
A través de
los años he escuchado muchos relatos de creyentes que han visto o percibido la
presencia de ángeles brindándoles auxilio, aliento y protegiéndolos en tiempos
difíciles, como así también en la vida cotidiana normal. Estas narraciones
parecen despertar interés entre los cristianos en la actualidad porque a muchos
les recuerdan que los ángeles son tan reales y están tan activos ahora como en
los tiempos antiguos. Con frecuencia nos impactan más los relatos de
acontecimientos personales y actuales que los de aquellos sucesos que han
ocurrido largo tiempo atrás y de los que no tenemos experiencia personal
alguna.
Al iniciar
este estudio sobre los ángeles, tenga presente que las cosas que va a leer en
la Biblia son tan ciertas hoy como lo eran entonces. Los ángeles están
presentes y, sin lugar a dudas, ministran hoy en día tal como lo han venido
haciendo desde que Dios los creó.
En el Salmo 103.20–21 se hace referencia a cinco
ministerios de los ángeles, que se enumeran a continuación. Al leer los
siguientes versículos, anote cualquier otra descripción de la actividad
angelical que se mencione allí, tales como los métodos de que se valen, su
aspecto, los nombres generales y específicos que se usan con referencia a los
ángeles, etc.
Veamos
los versículos siguientes para anotar algunos aspectos de los ángeles:
Nehemías 9.6
¡Tú solo eres YHVH! Tú hiciste
los cielos, los cielos de los cielos y toda su hueste, la tierra y cuanto hay
en ella, los mares y todo lo que contienen. Tú das vida a todo ello, y las
huestes de los cielos se postran ante Ti.
Hebreos 1.6
Y otra vez, cuando introduce
al Primogénito en el mundo, dice:
Adórenlo todos los ángeles de
Dios.
Mateo 13.41–42
41 Enviará el Hijo del Hombre a sus ángeles, y recogerán de su reino a
todos los que causan tropiezos y a los que hacen iniquidad,
42 y los echarán al horno de fuego. Allí será el llanto y el crujido de los
dientes.
Hebreos 1.13–14
13 Y, ¿a cuál de los ángeles dijo alguna vez:
Siéntate a mi diestra, Hasta
que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies?
14 ¿No son todos espíritus ministradores, enviados para servicio a favor de
los que van a heredar salvación?
Hechos 12.5–11
5 Así que Pedro estaba custodiado en la cárcel, pero la iglesia hacía
ferviente oración a Dios por él.
6 Cuando Herodes lo iba a sacar, aquella noche estaba Pedro durmiendo
entre dos soldados, atado con dos cadenas; y unos centinelas delante de la
puerta vigilaban la cárcel.
7 Y he aquí, una luz resplandeció en la celda y apareció un ángel del
Señor, el cual, golpeando el costado de Pedro, lo despertó, diciendo:
¡Levántate pronto! Y las cadenas se le cayeron de las manos.
8 El ángel le dijo: Cíñete y átate las sandalias. Así lo hizo. Y le dice:
Ponte el manto y sígueme.
9 Y saliendo, lo seguía; pero no entendía que lo que estaba sucediendo por
medio del ángel era real, sino que suponía estar viendo una visión.
10 Y pasando la primera y segunda guardia, llegaron a la puerta de hierro
que conduce a la ciudad, la cual se les abrió por sí misma; y saliendo,
caminaron a lo largo de una calle, y súbitamente el ángel se apartó de él.
11 Y Pedro, volviendo en sí, dijo: Ahora entiendo de verdad que el Señor
envió su ángel, y me ha rescatado de la mano de Herodes, y de toda la
expectación del pueblo de los judíos.